Este otoño, te recomendamos dejarte llevar por el romanticismo audiovisual:
Una cuestión de tiempo
Tim Lake es un joven de 21 años que descubre que puede viajar en el tiempo. Su padre ( le cuenta que todos los hombres de la familia han tenido desde siempre ese don, el de regresar en el tiempo a un momento determinado, una y otra vez, hasta conseguir hacer «lo correcto». Así pues, Tim decide volver al pasado para intentar conquistar a Mary, la chica de sus sueños.
La casa del lago
Una doctora solitaria y un arquitecto se enamoran platónicamente escribiéndose cartas a través de un correo que, misteriosamente, une el tiempo pasado con el presente. La Cuando la Dra. Kate Forester decide abandonar Illinois para trabajar en un hospital de Chicago, lo único que lamenta es dejar la hermosa casa con vistas al lago en la que vivía. Antes de irse, deja una nota en el buzón dirigida al próximo inquilino, pidiéndole que le envíe el correo a su nueva dirección y explicándole que las extrañas huellas de patas que hay en la puerta de entrada ya estaban allí cuando ella se instaló en la casa. Cuando el nuevo inquilino Alex Wyler llega, lo que ve es una casa abandonada con el jardín invadido por la maleza. Y lo que no ve son huellas de patas por ningún lado…
Cómo conocí a vuestra madre
El idealista y romántico empedernido Ted les cuenta a sus dos hijos cómo conoció a su madre y cómo fue su vida hasta que encontró el amor verdadero. Contó para ello con la ayuda de sus mejores amigos: el ligón Barney, el bonachón Marshall y la novia de éste, la profesora de guardería Lily. Cuando Ted conoce a Robin, una guapa joven canadiense que acaba de mudarse a Nueva York, está completamente seguro de que es amor a primera vista.
